Para llevar a cabo este proyecto es necesario contar la historia de fondo: Desde hace algo más de un año, he estado alimentando a una gata callejera que nunca se dejó coger, ya que era salvaje. A pesar de no dejarse coger, esta gata se fue familiarizando conmigo a medida que pasaba el tiempo. Un día me siguió hasta la puerta de casa sin que yo me diera cuenta y a partir de entonces era frecuente encontrarla allí a cierta hora para que le diera de comer, pero siempre manteniendo las distancias hasta hace relativamente poco (diciembre más o menos) que empezó a dejarse tocar y sorprendentemente hasta a subirse en mis piernas mientras la miraba comer. Pero no se dejaba coger, un día quise subirla a casa y aún tengo una cicatriz en el pecho que demuestra que no era el momento adecuado. Hace algo más de un mes, decidí comprar todo lo necesario para sacarla de la calle (pienso, comedero, cuna y lo más importante, el transportín) aunque fuera a la fuerza, pues hacía demasiado frío y sabía que al final se haría dócil, pero precisamente hoy hace un mes, tras un par de días sin verla, salí en su busca y la encontré tirada en el suelo, estaba enferma de un virus casi letal (calicivirus) por lo que inmediatamente la llevé al veterinario y tras una cara e infructuosa semana de tratamientos, decidí que lo mejor era sacrificarla porque no respondía a los mismos. Una decisión muy dura, pero necesaria y en mi opinión, sensata, pues me encariñé tanto con esta gata que verla sufrir así era demasiado doloroso, así que preferí sufrir yo.

Fruto de ese sufrimiento nació lo que hoy presento como proyecto, pero antes de presentarlo haré saber que mi trabajo es la composición en otro ámbito muy distinto como es el de la música "Metal", concretamente desarrollo esta labor en el grupo "Divino Disturbo", del que soy bajista y alma mater. Además, estoy realizando mis primeras incursiones en el mundo de la composición para bandas sonoras. Sirva todo esto para demostrar que la composición de esta nana no es una pieza de cantautor consistente en guitarra y voz, sino que para la misma contaré exclusivamente con instrumentos orquestales como violín, violoncello, arpa, flauta travesera, etc...además de la voz.

Esta nana es un homenaje a esta gata, a la que tuve a bien llamar "Bandida" tras su muerte, pues su carácter era de puro desparpajo. Componiendo esta pieza sólo tengo una intención, moverla tanto como sea posible y dar la opción de efectuar su descarga, bien gratuíta, bien de pago, siendo el importe de la última modalidad destinado íntegramente a la protectora "El Gato Andaluz" de La Línea de La Concepción (Cádiz).