En estos momentos tenemos el terreno que ya lo hemos comenzado a limpiar de maleza, jaras, y demás, para dejarlo listo para que se entretengan nuestras gallinitas.
Para el perimetro es necesaria una de malla de simple torsión como la que pusimos para nuestro primer gallinero, junto con sus puertas, postes, tensores y demás complementos. De esta forma evitamos que animales como la comadreja o el zorro entren al gallinero.
El gallinero será de obra nueva, con una altura de unos 1,80-2,00 metros para facilitar la limpieza e higiene del mismo y acondicionado para los meses de nieve del invierno.
Tenemos en mente, pero no es prioritario, en función de los amigos interesados, la opción de colocar un sistema solar para que las gallinas tengan un par bombillas para los meses de invierno que en seguida se hace de noche y puedan seguir entretenidas.
Por último el pienso ecológico, los comederos y bebederos junto con las gallinas que en sí también tienen un coste.
Nuestro objetivo es que entre todos podamos costear la construcción del gallinero, una forma de procomún, tan extinta en nuestros días, y los colaboradores en vez de que realicen una aportación a fondo perdido, reciban una retribución en especie en forma de huevos durante todo un año.
Es decir, fomentar una pequeña colaboración social, en la que unos hacen tareas de construcción y mantenimiento del gallinero y gallinas durante el año, y otros aportan capital para recibir un producto de máxima calidad y sabor durante el año.
Para poder comenzar el proyecto, necesitamos colocar vallas, los materiales para construir el gallinero, y comprar el pienso, comederos, bebederos y, sobre todo, las gallinas. La mano de obra es sin coste, porque lo haremos entre nosotros y todo aquel amigo que quiera ayudar.
Las necesidades económicas mínimas son 4.850 €.
Si superamos este importe, podremos destinarlo a colocar el sistema de alumbrado solar e incluso comprar una incubadora de huevos para poder regalar pollitos a nuestros colaboradores, que al final, ya serán amigos.