NUESTRAS NECESIDADES
Aquí es donde TODOS vosotros entráis en juego, desde las pequeñas aportaciones económicas a cambio de recompensas, pasando por aportaciones a cambio de publicidad o esponsorización de empresas, la Banda de Cornetas y Tambores Virgen de la Salud está abierta a toda forma de colaboración.
Para llevar poder concluir con éxito el proyecto, necesitamos un total de 22.000 €, (aunque via crowdfunding serian suficientes 15.000 €, nos gustaría llegar a los 22.000) que aunque parezca descabellado, y una cantidad algo elevada, si dividimos esa cantidad por 110 componentes que tiene nuestra banda, veremos que el gasto por uniforme ronda los 200 €, cantidad que ya no nos resulta tan elevada, si la comparamos con la compra de un traje normal en un comercio tradicional.
Si además tenemos en cuenta que el actual uniforme ha durado casi 20 años, esa cantidad que solicitamos se queda hasta pequeña, teniendo en cuenta que esos 200 € por componente que nos hacen falta, incluyen: el diseño del uniforme, la compra de las materias primas, parte de la confección de los trajes y el envió a Huelva de los mismos (en caso de confeccionarse fuera de la provincia).
UN POCO DE INSPIRACIÓN
Decía Carlos Gardel en su famosísimo tango:
Sentir... que es un soplo la vida,
Que veinte años no es nada,
Que febril la mirada, errante en las sombras,
Te busca y te nombra.
Vivir... con el alma aferrada
A un dulce recuerdo
Que lloro otra vez...
- sentimos que es un soplo nuestra vida, como todo lo efímera que puede ser nuestra música, pero siempre estaremos ahí.
- que nuestra mirada es febril errante en la sombra, por estar enamorados de ti.
- Te busco y te nombro, En todas las esquinas Siempre Salud
- Con nuestra alma aferrada, a ti banda mia
- Y a un dulce recuerdo, el de cuando éramos chavales
- que lloro otra vez, por recordar esos primeros pasos dentro de ti Salud, tan llenos de ilusión e inocencia,
Y 20 años para nosotros no son nada, ahora son otros los jovenes que empujan con fuerza, que nos dan esa ilusión, y sin ser conscientes de ello, son nuestro motor, sus ganas, su inocencia, en definitiva nuestro apoyo. 20 años han pasado en nada, ayer mismo celebramos 10 años de existencia, y en no mucho mas cumpliremos 30.
Lo malo es que desgraciadamante, para nuestro uniforme, 20 años son demasiados, y aunque los cuidamos muy bien (si no, no hubieran durado 20 años), paso del tiempo se va notando en ellos.
Por eso nuestra necesidad es esa, cambiar nuestra seguda piel llamada uniforme.