"Su suerte había cambiado. Lo notaba, lo presentía. Por fin las cosas iban a empezar a irle bien. Aquello solo había sido el principio. Se imaginó como sería su vida ahora que la fortuna estaba de su lado. Nadie le negaría nada, podría tener todo lo que siempre había soñado.
Cuando prendió el billete con el mechero se reafirmó. Estaba completamente convencido.
Le había tocado la lotería, los siete millones de euros, y tenía en su mano el billete que lo acreditaba. O lo que quedaba ya de este. Pero confiaba tanto en su suerte, que sabía que daba igual que lo quemara, porque ahora que las cosas habían cambiado, iba a volver a tocarle."
Efimeridades es una recopilación de cuentos cortos y microrrelatos que aunque se leen muy rápido, tienen intención de quedarse en tu cabeza durante más tiempo.
Una mezcolanza de géneros y estilos que promete tenerte pensando un par de minutos tras leer cada cuento.
Hay microrrelatos de unas pocas lineas y algunos divididos en varias partes formando historias más largas y diversas.
Continúa las historias en tu mente, ponles un principio e inventa razones para justificar por qué pasa lo que pasa. Prácticamente todos tienen distintas lecturas e interpretaciones.
"En un espacio de dieciséis años, más de treinta niños habían desaparecido en los pueblos de alrededor. Algunos lo llamaban ya la maldición de Everett Valley, y nadie sabía qué hacer ni como pararlo.
Hay quien afirmaba que era un castigo divino y que la culpa era nuestra. Pero yo sé que el culpable de todas las desapariciones había sido aquel hombre que vivía en lo alto de la montaña, el que fue encontrado hace poco en su casa muerto, lleno de marcas de manos pequeñitas."
Para eso es este libro. Son pequeñas bombas en forma de idea, que estallan cuando las lees y te hacen incluso inconscientemente crearle unas bases a cada cuento.
Influencias de Poe, Lovecraft y los grandes del género mezcladas con comedia y sátira que sentirás que tienes que leer una y otra vez.
"Entonces fue cuando me explicó su teoría. Ella dijo que en esta vida tienes que haber amado, y el que no, aquí se queda hasta que lo haga.
Sonreí ante su teoría sobre el amor y la muerte y la besé en la frente como quien sonríe ante el razonamiento de un niño pequeño.
Ella, también sonriendo, atravesó la pared con gesto despreocupado."
Más de 200 páginas del cuarto género narrativo.
