Colaborando en esta campaña preventa recibirás el libro en casa antes de que entre en circulación, para que esto sea posible nos hemos propuesto alcanzar en torno a 40 reservas, para iniciar los procesos de edición justo después de finalizar la campaña; en un plazo de unos meses.
Dos agentes de policía, uno al inicio de su carrera y otro a las puertas de la jubilación, se enfrentan a la resolución de un asesinato sin móvil aparente. A este crimen se sumarán un secuestro y el robo de un testamento. Las víctimas, tres mujeres. ¿Algo en común entre todas ellas? Esta es la pregunta a la que los agentes de policía y una detective privado, con la ciudad de Cádiz como escenario y la cafetería La Gitanilla como epicentro de los acontecimientos, tendrán que dar respuesta en esta novela. Una historia en la que la traición y la venganza acaparan gran parte del protagonismo.
Enrique Panao Guarino nació en Cádiz en 1980. Es licenciado en Historia por la Universidad de Cádiz. Obtuvo la licenciatura de Humanidades poco tiempo después en la misma universidad. Completada su formación académica, decidió dedicarse a la docencia. Ejerce como profesor de Geografía e Historia desde el año 2006 en un instituto público, después de obtener su plaza por oposición. Desde entonces compagina su trabajo en las aulas con sus otras pasiones. Es un lector voraz, un viajero incansable y un apasionado del arte. Actualmente reside en San Fernando (Cádiz). Sus dos hijas, Miriam y Daniela, colman de felicidad sus días.
«La Gitanilla es un thriller policiaco lleno de giros insospechados en el que la venganza, la traición y la mentira están siempre presentes. En esta novela las apariencias a veces engañan y será extraño que no se sorprenda con la evolución de los acontecimientos. La ciudad de Cádiz sirve de telón de fondo a esta historia y de la mano de sus protagonistas conocerá algunos de los rincones más pintorescos de esta ciudad, así como varias de sus leyendas y curiosidades. Por otro lado, si es amante del café, en La Gitanilla aprenderá sobre su origen y sus secretos. Atrévase a acompañar a los inspectores Gálvez y Soria, y a la detective Laura Castillo, en sus investigaciones. Le aseguro que no le defraudarán».
«La Gitanilla es la cafetería más sucia de todo Cádiz. Los azulejos de sus paredes están cubiertos por una mugre de la que parece enorgullecerse el dueño del garito: Joaquín García, hijo de otro Joaquín García, quien abriera el local allá por los años sesenta. Si Joaquín padre se jactaba de fregar poco aquellos azulejos y barrer aún menos las servilletas aceitosas que iban a parar al suelo hechas una bola, Joaquín hijo no le va a la zaga y se mantiene fiel a la pringosa tradición. El resultado de esta sucia manía se la puede usted imaginar sin necesidad de que aquí se describa. Solo apuntaremos el hecho de que una pátina brillante y pegajosa cubre las mesas y la barra donde los clientes apoyan los brazos cada vez que acuden a La Gitanilla a tomarse un café. Tanto es así que cuando alguien entra con sus vestimentas limpias en el local de Joaquín García, tiene la certeza más absoluta de que va a salir manchado, llevándose consigo para el resto del día un pedacito de la grasienta dejadez de su propietario. Sin embargo, quien piense que por todo esto el negocio ha de ser forzosamente ruinoso, anda equivocado. Con independencia del día de la semana en el que nos acerquemos a su puerta, ya sea verano o invierno, temprano o tarde, laborable o festivo, siempre se ve acompañado Joaquín García de una nutrida clientela. Sola una es la razón de esta extraña paradoja. Sepa que, a pesar de toda la mugre acumulada, de la pringue mal disimulada y de la roña allí concentrada, en ese antro asqueroso fundado hace justo medio siglo, Joaquín García prepara el café más exquisito de todo Cádiz».
Por otro lado, independientemente de que colaboréis realizando vuestra reserva o no, en ocasiones no se puede, sería una inestimable ayuda que os hicieseis eco de esta campaña a través del boca-oreja o por redes sociales... la Cultura, Distrito 93 y Enrique Panao Guarino os lo agradeceremos.
