Colaborando en esta campaña preventa recibirás el libro en casa antes de que entre en circulación, para que esto sea posible nos hemos propuesto alcanzar en torno a 50 reservas, para iniciar los procesos de edición justo después de finalizar la campaña; en un plazo de unos meses.
Tras el ataque a la Fortaleza Blanca, los cimientos de Meindra se tambalean. El Senado está herido de gravedad y la humanidad teme el retorno de los sandelas y, con ello, que la manipulación y el engaño asolen de nuevo sus vidas.
Kisela, la casa de los Guardianes de la Realidad, afronta un momento complicado: despide a quienes fallecieron en el Golpe y se siente traicionada por dos de sus más diestros guerreros.
Kay y Áledrin decidieron proteger, aun sabiendo que las consecuencias serían catastróficas, a quien debían destruir: una sandela que desconocía su identidad. Ahora, huyen de Kisela, su hogar, y se enfrentan a los que antaño fueron sus hermanos y amigos, desesperados por sobrevivir.
Bálner, que ha enterrado sus emociones para alejar el dolor y cumplir con su prometida venganza, lidera la persecución contra los desertores y la sandela que los acompaña.
La línea entre lo correcto y lo incorrecto, el deber y la justicia, es más tenue que nunca antes. ¿Merece la muerte una persona por el hecho de ser sandela? La realidad es lo más preciado pero, ¿a qué coste?
Laura E. Lafuente (Guadalajara, 1992) reside en Madrid con su pareja y su perro. Es bióloga y trabaja coordinando el desarrollo de ensayos clínicos. Compaginar su carrera en el ámbito de la salud con la escritura profesional no es fácil, pero su pasión por ambos mundos la impulsa.
En 2021 publica su primera novela, La Verdad en los Relatos I, con la editorial Malas Artes (Bunker Books). En 2022 irrumpe de nuevo con Guardianes de la Realidad, la segunda entrega de la saga, también con Malas Artes Editorial.
En 2023, de mano de la editorial Libros Indie, publica La Sandela, una novela independiente que es una precuela de la saga La Verdad en los Relatos.
Laura ha creado el mundo de los espejismos, donde se ambientan todas sus novelas. Una fantasía distópica donde la realidad se encuentra constantemente amenazada, de modo que verdad y mentira se entrelazan.
Regresa ahora con más fuerza que nunca con la que será su novela más larga hasta el momento: la tercera entrega de la saga, El Pueblo Prisionero, de nuevo con Malas Artes Editorial. Esta novela se pone a la venta temporalmente a través de esta campaña y su lanzamiento oficial tendrá lugar durante los primeros meses de 2024.
«Querido lector:
Con esta novela, la tercera entrega de la saga, te animo a sumergirte de nuevo en el mundo de los espejismos. Descubre cómo la trama llevará a los personajes al límite en su misión por proteger la frágil realidad; convertirá amigos en enemigos por discordancias en lo que cada uno considera justo; mientras todos, sean humanos o sandelas, luchan por su propia supervivencia y libertad.
Siguiendo con la estética de la saga, cada capítulo de El Pueblo Prisionero está destinado a un personaje que nos ofrece su visión de la historia, de modo que todas las verdades sean tenidas en cuenta en este relato donde la realidad es lo más importante, pues el engaño siempre acecha.
Si, por el contrario, has llegado hasta aquí sin haber leído La Verdad en los Relatos I y II, sería para mí un honor que decidieras adentrarte en esta historia de fantasía distópica que ya ha cautivado a muchos lectores tanto afines al género como a otros que se inician en él»
«—No hace falta que aparentes ser amable, Áledrin. Estás aquí por Kay. No finjas que te preocupas por mí —la acusó Yira abruptamente.
Paciencia..., se dijo Áledrin a sí misma, conteniendo un suspiro. Las asperezas de Yira hacia ella se habían suavizado en las últimas semanas. Sin embargo, de vez en cuando, como en aquel momento, Yira acometía contra la kie-hai para recordarle que, para ella, siempre sería la asesina de Mark y que nunca la perdonaría por ello. No tiene que perdonarme. Basta con que confíe en mí, se recordó.
—Sí y no —contestó Áledrin, mientras colocaba los víveres sobre las baldas de una alacena—. Seguiría a Kay al fin del mundo, pero no estoy aquí solo por él. Hace mucho tiempo, yo llegué a un lugar donde no fui bien recibida solo por el hecho de ser distinta. Sin embargo, hubo un chaval, poco más que un niño, que, sin conocerme, creyó en mí, me defendió y me salvó la vida.
—Kay —comprendió la sandela, mirándola con renovado interés.
—Aquí ocurre lo mismo, Yira, solo que a una escala mucho mayor. El mundo te teme, y, por tanto, te ataca, solo por ser diferente. Y, como en mi pasado hubo personas que apostaron por mí, yo quiero apostar ahora por ti. No tienes la culpa de ser distinta, pero demuéstranos que no nos equivocamos contigo.
Qué curioso... eso es lo que me pidió Fervian a mí, se percató, apesadumbrada. Para Áledrin, el director de Estrategia era un referente. La persona que había apostado por ella contra las advertencias de los demás en Kisela, dándola un futuro. Parece que sí te equivocaste conmigo, Fervian. Lo siento...
—No tengo que demostrarte nada. Ni siquiera debería dirigirte la palabra. ¡Mataste a Mark! —recordó Yira una vez más, agitando el embutido que sostenía en la mano.
—No me lo demuestres a mí si no quieres. Demuéstraselo a Kay.
Áledrin percibió cómo la expresión de Yira cambiaba de pronto. Su enfado hacia ella se desvaneció y se convirtió en miedo e inseguridad.
—Él... —musitó la sandela—. Kay pronto se arrepentirá de lo que hizo, si no se ha arrepentido ya…»
Por otro lado, independientemente de que colaboréis realizando vuestra reserva o no, en ocasiones no se puede, sería una inestimable ayuda que os hicieseis eco de esta campaña a través del boca-oreja o por redes sociales... la Cultura, Malas Artes y Laura E. Lafuente os lo agradeceremos.
