SINOPSIS DE « EL MISTERIOSO CANDOR DE LOS TRENES”
En una suntuosa mansión colgada de un acantilado, sobre el mar Mediterráneo, aparecen dos cadáveres. Son marido y mujer. Están sentados ante una mesa espléndida, con mantel y servilletas de un blanco impecable, sin que falten los candelabros, los más delicados manjares, vinos y champán.
Se habían vestido de punta en blanco para lo que tenía todo el aspecto de una cena romántica. Sin embargo, se habían envenenado el uno al otro. ¿Por qué no de común acuerdo o mediante la intervención de un tercero? Pues porque en ambos casos lo más lógico habría sido utilizar un solo veneno para los dos. Y allí se habían utilizado dos tósigos distintos y dificilísimos de obtener, tanto el uno como el otro. Pero ello planteaba una dificultad: la coincidencia temporal en el paso al acto.
¿Cómo, sin previo acuerdo, se les ocurrió a los dos hacer lo mismo, en el mismo momento? Al inspector Páramo sólo se le ocurría una pista: la noche anterior se había producido el fenómeno conocido como luna roja.
Interviene un flashback y un cambio de espacio radical. Nos trasladamos a Buenos Aires donde un joven detective da sus primeros pasos en la investigación criminal bajo la tutela del inspector Esteban Mendoza, el cual, por primera vez en su vida, se halla en un callejón sin salida pues, con toda su ciencia y experiencia, no es capaz de echar el guante a un asesino en serie que suele actuar en los alrededores de la Estación de Retiro. Este asesino parece pasar por debajo de todos los radares. Y hay otra cosa que desconcierta particularmente a Mendoza. Las víctimas son atrozmente mutiladas en lugares donde mucha gente debía haber escuchado sus gritos y no fue así.
Paralelamente, se desarrolla otra acción. Una abuela de la Plaza de Mayo investiga todavía sobre el paradero de sus hijos, los padres de Donato, el nieto que la policía le permitió conservar. La compañera de Donato se obsesiona porque cree conocer la identidad del asesino de Retiro. Según ella, es su vecino de arriba, Mario Aventino.
Todo va a concluir en la lujosa mansión del principio, habitada ahora por otra pareja.
BIOGRAFÍA.
José Alemany Puig (Sueca, 1959), licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Valencia. Residente en Francia desde 1989. Actualmente catedrático de español en el Lycée Estienne d´Orves, Niza.
Premio de relato corto de la Fundación Fernández Lema (Luarca), en su edición de 2003, con un trabajo titulado “El vuelo de las ocas salvajes”, publicado en 2006 por la editorial Trabe. Finalista en el premio de relato de la UNED en su edición de 2007 con un trabajo titulado “La hora de Leviatán” y publicado por los servicios de la misma. Participa en la antología de narrativa “Cruzando el río”, publicada en 2010 por la editorial Crealite, con un relato titulado “Fábula de otoño.”