¿QUIENES SOMOS?
La casa Juventude do Maio, es asociación sin fines lucrativos, fundada en 2010 y ubicada en Porto Inglês, Cabo verde. Tenemos como compromiso responder colectivamente y de forma adecuada a los desafios de un desarrollo en la promoción de los derechos de los jóvenes.
¿PORQUE PEDIMOS AYUDA?
La pobreza es el principal problema al que se enfrentan los niños. Este hecho se ve agravado por las desigualdades crecientes entre las regiones ricas y pobres, los niños urbanos y rurales, los niños y las niñas, y entre las diez islas que forman el archipiélago.
La ayuda financiera que el Estado ofrece a las familias para sus niños, y particularmente a las familias monoparentales, es insuficiente.
La falta de recursos, las malas condiciones de vivienda, la debilidad de los sistemas de seguridad y protección sociales, e incluso la dificultad para hacer respetar las obligaciones alimentarias de los padres que no tienen la custodia de sus hijos, son problemas a los que se enfrentan estos niños.
La duración mínima de escolarización obligatoria es insuficiente y muchos niños abandonan sus estudios de forma prematura para poder trabajar, a pesar de que la edad legal para empezar a hacerlo es más tardía.
Numerosas chicas son penalizadas por llevar a cabo la «suspensión temporal para alumnas embarazadas» y no vuelven a estudiar después del parto.
Por otro lado, la enseñanza es generalmente de mala calidad, el material insuficiente, y los profesores escasos y, en ocasiones, poco formados.
Por último, el acceso limitado a las guarderías y centros previos a la educación primaria, sobre todo para los niños desfavorecidos, es lamentable.
La Constitución caboverdiana no prohíbe la discriminación, especialmente la que está relacionada con la discapacidad o el sexo. Por lo tanto, la discriminación hacia las mujeres, que supone una práctica muy extendida, puede influir sobre sus hijos.
Los castigos corporales siguen siendo una práctica muy extendida tanto en el hogar como en las escuelas. También, la policía ha recurrido a laviolencia contra grupos vulnerables como losniños que viven en la calle.
La población parece no estar lo suficientemente sensibilizada respecto a los métodos disciplinarios respetuosos con la dignidad del niño y conformes a la Convención.
Por otro lado, también han tenido lugar casos de violencia sexual y de incesto. Desafortunadamente, las investigaciones de este tipo de prácticas son aún escasas, debido principalmente a los tabúes culturales que impiden denunciar este tipo de casos.
A pesar de haber experimentado un progreso en este ámbito, las muertes de niños a una temprana edad son aún muy numerosas en este país. A menudo, éstas son consecuencia de enfermedades diarreicas, afecciones respiratorias, y otros problemas de salud como la desnutrición.
Por otra parte, el sistema de seguridad social no es muy competente y las instalaciones sanitarias, las condiciones de vivienda y acceso alagua potable son deficientes para casi el 20% de la población.
Los niños que viven en zonas rurales resultan particularmente afectados, sobre todo en las islas más recónditas.
Además, los servicios de salud sexual y planificación familiar son limitados, así como los cuidados prenatales y durante el puerperio. La educación sexual es también insuficiente, especialmente la que se refiere a la prevención de embarazos precoces, los abortos clandestinos cuya práctica es habitual, y la lucha contra las enfermedades de transmisión sexual como el VIH/SIDA.
La drogadicción es también un fenómeno cada vez más frecuente en Cabo Verde, especialmente en los centros de Praia, Mindelo y Sal.
Los adolescentes sufren tanto de alcoholismo como de tabaquismo.
Por último, en pocas ocasiones se tratan las enfermedades psicológicas de niños y jóvenes, puesto que el acceso a los cuidados de salud mental es muy limitado.
Los niños discapacitados se encuentran en una situación aún más difícil que el resto de niños caboverdianos.
Aunque se han llevado a cabo programas específicos para promover la adaptación de estos niños, no existen en el archipiélago instituciones especializadas para acogerlos. Desgraciadamente, estos niños no tienen acceso al sistema educativo regular.
Explotación sexual y trata de niños
Cabo Verde es un país de tránsito para la trata de niñas que a menudo han tenido que recurrir a la prostitución para sobrevivir. Sin embargo, la explotación sexual afecta también a los chicos jóvenes, como es especialmente el caso en la isla de Sal.
Por otra parte, el escaso número de campañas de información y prevención, y la ausencia de servicios de adaptación y reinserción en este ámbito son muy preocupantes.
Niños de la calle y trabajo infantil
Muchos niños viven en la calle debido a su nivel de pobreza. Estos abundan principalmente en los centros urbanos. A menudo trabajan como vendedores o lavan coches. Vulnerables y generalmente sin protección, estos niños corren el riesgo de ser maltratados y pueden ser obligados a robar para el beneficio de algunos adultos.
Para ayudarles, se han puesto en marcha programas de reunificación familiar, asistencia educativa y sistemas de adaptación, pero aún son insuficientes.
Interés del niño
Los programas destinados a los niños no tienen lo suficientemente en cuenta ni la Convención de los Derechos del Niño ni sus principios, uno de los cuales es el interés superior del niño.
La formación de los profesionales que trabajan con niños y la sensibilización respecto a sus derechos son aún insuficientes.
La Convención Internacional de los Derechos del Niño no se aplica de forma directa por parte de los tribunales ni por las instituciones administrativas.
Por otro lado, la ausencia de un organismo específico para recibir las denuncias de los niños y realizar un seguimiento de tales violaciones de forma coherente es lamentable.
A menudo, aún se utiliza la detención como solución para los niños de más de 16 años quienes son, además, encarcelados en pabellones para adultos.
Los niños no reciben demasiada información, y la duración de la detención no es lo suficientemente limitada para los menores.
A este problema se suman la superpoblación carcelaria y la ausencia de instalaciones específicas adaptadas a la edad y necesidades de estos menores.
¿PARA QUIEN LO HACEMOS?
Este proyecto tiene como beneficiarios a los jóvenes en riesgo de exclusión social en situación de pobreza y vulnerabilidad.
En el programa el número de beneficiarios es de 466 jóvenes comprendidos entre los 5 y 20 años en la localidad de Porto Inglês.
¿CUAL ES LA DURACIÓN DEL PROGRAMA?
El periodo previsto de toda la propuesta es 12 meses. Periodo de verano 2015 y calendario lectivo 2015/2016.
¿QUE OBJETIVOS TENEMOS?
Objetivo General
Objetivos Específicos
¿COMO VAMOS A TRABAJAR?
ESTRUCTURA GENERAL DEL PROGRAMA
FORMACIÓN
Los temas a tratar son: Salud (sexualidad, E.T.S., VIH, drogas y adiciones); vida en comunidad (convivencia, normas); resolución de conflictos (técnicas de mediación) y educación (importancia de la educación formal y no formal).
ACTIVIDADES CULTURALES, DEPORTIVAS Y DE OCIO
Las actividades a llevar a cabo: Taller de musica, teatro, danzas y bailes, gymncanas, pintacaras, taller de manualidades, actividades deportivas varias.
* Las actividades relacionadas con la sexualidad, enfermedades transmitidas sexualmente y drogodependencias serán dedicados unicamente a adolescentes de 12-20 años. Todas las otras actividades tendrán como beneficiarios a todos los jóvenes.
¿PORQUÉ DECIDIMOS ESTAS ACTIVIDADES?
Las actividades fueron elegidas por profesores, cuidadoras y por los propios beneficiarios, para proporcionar recursos humanos, financieros y materiales indispensables para alcanzar los objetivos de este proyecto.
La actividades escogidas mantienen, refuerzan y califican el capital humano para permitir desenvolver un mejor acceso a la educación social y cultural.
E_mail: casajuventude.do.maio@gmail.com
Facebook: Casa juventude do Maio